El último día del mes se perdieron por primera vez más de
300.000 empleos en una sola jornada.
El día 31 de agosto de 2018 se batió un triste récord para
el mercado laboral en España. Por primera vez en un solo día se destruyeron más
de 300.000 puestos de trabajo. Fue viernes, la jornada de la semana donde más
puestos de trabajo se dan de baja habitualmente en la Seguridad Social. Y
encima, el último día de agosto y de la temporada de verano. La combinación
arroja cifras récord: se dieron de baja 363.017 afiliados y solo 58.375 de
alta. El saldo neto: 304.642 empleos menos, el récord para una sola jornada.
La cifra de bajas de afiliados para un solo día (que no se
deben confundir con despidos) no es la más alta (se han llegado a dar de baja
medio millón de empleos en una jornada). Pero esos terremotos de afiliación
suelen ir acompañados de otras tantas altas. Con lo que entre los trabajadores
y salen y los que entran, el saldo neto siempre se había quedado por debajo de
los 300.000 empleos destruidos. Hasta ahora.
Estas cifras no representan necesariamente despidos, sino
finalizaciones de contrato: muchas veces simplemente son bajas que en la
siguiente jornada (o el lunes siguiente) retoman su trabajo con un nuevo
contrato. De hecho, una de las características del nuevo mercado de trabajo
postcrisis es la de la proliferación de contratos: cada vez más cortos.
El paro sube en 47.047 personas en agosto tras destruirse
203.000 empleos.
La Seguridad Social recupera la cota de los 19 millones de
afiliados 10 años después.
La temporalidad y la precariedad hace que se firmen muchos
acuerdos de una semana e incluso de solo un día de duración. El número de
contratos registrados solo durante el mes de agosto ha sido de 1.602.495.
Supone un incremento de 66.095 (4,30%) sobre el mismo mes del año 2017. Del
total, 1.448.574 eran contratos temporales. En julio (mes para el que ya hay
estadísticas detalladas de todos los tipos de contrato firmados) de los más de
dos millones de contratos que se rubricaron, 515.220 eran para una duración de
menos de siete días. Y otros 91.664 contratos eran de entre 7 y 15 días.
Como balance final, en el mes de agosto, según los datos
publicados este martes, el número de parados registrados en las oficinas de los
Servicios Públicos de Empleo ha subido en agosto en 47.047 personas en relación
con el mes anterior. Es el mayor aumento del paro registrado para un mes de agosto
desde 2011. Y se han destruido casi 203.000 empleos. Eso significa que la
creación de empleo registra su peor cifra desde enero de 2016 y el peor mes de
agosto desde 2008.